Existen opciones para diabéticos

Estimado lector,

Pensé que la diabetes no se podía revertir o curar:

Tiene razón. Por lo menos, parcialmente.

Con la medicina tradicional, la diabetes será una condición para toda la vida. La medicina tradicional «lucha» contra la Diabetes a través de medicamentos para tratar los síntomas de la enfermedad, pero nunca se ocupó del origen del problema.

De hecho, los médicos reconocen que no tienen una idea clara de cual es la causa su origen , que no saben cómo eliminarla. En Occidente tenemos una alta incidencia de esta enfermedad, que prácticamente no existe en los lugares «no desarrollados» del mundo. Esto se ha sabido desde hace mucho tiempo, y durante años, los mejores microbiólogos, médicos y científicos han buscado una respuesta. Ahora de la observación y las experiencias de vida como consecuencias de haber experimentado este diagnóstico  y tener la iniciativa de entender de que me ocurría he aprendido a crear mis propios protocolos que me han servido y no tengo inconvenientes en compartirlos.

El cuerpo está diseñado para curarse a sí mismo, proveyéndolo siempre de lo que necesite para realizar su trabajo. Y su dieta es una de las mayores influencias en el estado de su diabetes.

Probablemente haya oído el viejo refrán: «Somos lo que comemos». Esta afirmación parece estar más cerca de la verdad cuando se trata de los diabéticos, más cerca de lo que mucha gente se imagina aunque yo pienso que es mejor decir “Somos lo que absorbemos”.

¿Cómo puede nuestra alimentación ser un impacto tan grande en nuestra salud?

Imagine que su cuerpo es un automóvil, que fue diseñado para funcionar con combustible orgánico completamente natural. El auto es una máquina que vive y respira, no muy diferente al cuerpo humano. Durante 4 millones de años, este auto ha estado utilizando combustibles, tales como:

	Agua		Hierbas
	Semillas		Plantas
	Frutos secos		Raíces
	Frutas		Cereales
	Hortalizas		Carnes y grasas animal

Ese es el combustible que ha usado.

Es más, ese es el combustible en el que se basa todo su sistema. Entonces, de repente, después de 4.000.000 años a ese auto le cambian (durante los últimos 100 años) a una mezcla nueva y moderna de:

	Azúcar		Café
	Dulces		Refrescos de soda
	Galletas		Chocolate
	Papas fritas		Cigarrillos
	Grasas y aceites procesados		Alcohol
	Jarabe de maíz		Pesticidas
	Medicamentos farmacéuticos		Cigarrillos
	Químicos		Etc.

¿Cuál será la consecuencia?

Se Descompone.(nos enfermamos)

Si sigue colocando combustibles que su cuerpo no puede procesar de forma adecuada entonces, finalmente, su «motor» comenzará a experimentar serias dificultades.

Algunas personas desarrollan tumores. Otras personas tienen su nivel de colesterol por las nubes. Para usted, su dieta y su estilo de vida están causando daño a un órgano muy específico llamado hígado que resulta ser el responsable de producir y liberar un sinnúmero de procesos que regulan el  equilibrio homeostático del cuerpo.

Este órgano es dañado debido a su dieta, que termina bloqueado por el exceso de grasa producidas como consecuencia del alto consumo de carbohidratos perdiendo la capacidad de filtrado que originalmente tenia.

Si lo piensa bien…

En realidad, la diabetes no es una “enfermedad”. Se trata de un «síntoma» (una «señal» ) de un fenómeno llamado resistencia a la insulina.  Su cuerpo necesita regular los niveles de azúcar en su sangre pero no puede metabolizar toda la glucosa que se está suministrando como consecuencia del exceso de azucares refinadas.

La diabetes no es por casualidad, es el resultado directo de un desajuste dentro de su cuerpo.

No estamos prestando atención al ORIGEN del problema y hasta que lo hagamos, estos problemas van a continuar e incluso empeorarán.

Demos una mirada a lo qué sucede en nuestro cuerpo. El páncreas es un órgano vital en nuestro cuerpo, cerca del estómago. Su función principal es producir la hormona llamada insulina. Los carbohidratos y solo los carbohidratos estimulan la secreción de insulina.

Los hidratos de carbono de absorción rápida (no los hidratos de carbono de absorción lenta) en nuestros alimentos, significan que el páncreas tiene que esforzarse más, y por lo tanto producir más insulina. Este exceso de insulina combinada con la glucosa se convertirán en grasa que se acumulará en su cuerpo principalmente en su área abdominal y el hígado. No es posible desarrollar diabetes tipo II sin antes haber llevado nuestro hígado a lo que llaman “fatty liver”. Cuando el hígado es llevado al limite creamos el fenómeno de resistencia a la insulina que en ocaciones es interpretada como una deficiencia en la producción de insulina del páncreas. En realidad esta resistencia es ocacionada por una sobre estimilación del páncreas que produce cantidades excesivas de insuluna que conbinadas con el azúcar se convierte en grasa.

Si el páncreas es sobre estimulado durante un largo período de tiempo, puede llegar a «agotarse» y sobrevenir la diabetes tipo 1.

Su páncreas puede también verse comprometido si es inundado por los ácidos, ácidos que no sólo provienen de los hidratos de carbono de absorción rápida que consumimos, sino también de los azúcares, ácido contenido en alimentos y ácido úrico (muy comunes en nuestra dieta moderna), ya que siguen del estómago directamente al páncreas.

Cuando millones de personas alrededor del mundo comienzan a experimentar los mismos problemas de salud, algo realmente está mal.

Algo está desequilibrado, y nunca es un «accidente».

Lo que los científicos entendidos en el tema  han comenzado a entender que la «Causa Fundamental» de la diabetes es que su cuerpo desarrolla resistencia a la insulina que termina pidiendo mas a su  páncreas  que como consecuencia de la inflamación producida por el abuso en el consumo de azúcar refinada comienza a enfermarse.

Dicho esto entonces hay una solución para evitar el problema que acabo de exponer:

Para detener la avalancha de problemas de salud debemos comenzar por hidratar tu cuerpo a razón de un vaso de agua de 8 onzas por cada 16 libras de peso. En lo posible restringir el consumo de carbohidratos refinados a no mas de 40 gramos al día. Sobre todo eliminar azúcares refinadas, carbohidratos refinados como harinas blancas de trigo, grasas parcialmente hidrogenados, las fuentes de ácido fosfórico(refrescos carbonatados en todas sus modalidades), y comidas cargadas con glutamato monosódico (MSG), organismos modificados genéticamente (OMG) y Jarabe De Maíz Con Alta Fructuosa (todos muy comunes en nuestra dieta moderna).

La mayoría de los alimentos en nuestra dieta moderna están llenos de ácidos, carbohidratos procesador, azúcares y grasas que fuerzan y sobrecargan el  hígado y el páncreas.

No basta con decir que no comer, también hay que hablar de que si podemos comer sin comprometer el sistema con carbohidratos que suban los niveles de glucosa.

Por ejemplo:

Desayuno sin remordimientos.

Huevos con jamón y queso en cualesquiera de sus modalidades revueltos, hervidos, fritos en fin como mejor te caigan con un generoso sumo de limón preferido sin azúcar añadida. La porción debe ser suficiente para lograr la saciedad.

Notaras que luego del desayuno tus niveles de glucosa en sangre se mantendrán estables y hasta incluso podrían disminuir un poco sin la necesidad de suministrar insulina.

Almuerzo con conciencia.

Carne blanca o roja a su preferencia a la plancha con vegetales salteados.

Para el diabético tipo 1 es recomendable una vinagreta sin azúcar o una salsa de queso.

Agua o sumo de limón.

Solo queda decir “Buen provecho”

La verdad nos hace libres y saludables.

ATT Jose J. Rivera